Hablar de uno mismo debe ser de las cosas más difíciles que me pidáis hacer, porque sería simple decir que soy el fotógrafo de bodas con más ganas de guardar vuestra historia en el tiempo. Pero, para quien vibra conmigo en la sombra sabe que hay algo más en mi persona que da razón a mi trabajo… Él es mucho más, detrás de su cámara se esconde un hombre real, fiel a un estilo sencillo y delicado, enamorado de los detalles y un entusiasta que contagia su amor por su trabajo desde el primer momento.

Fabián Luque, un tipo descarado que te diría que si pudiese elegir, pediría que los instantes pasasen más lentos, y justo esos instantes, son los que dan valor a sus fotografías.

Son esas lágrimas por quien no estuvo, aquel abrazo a quien ya se fue o vuestras caricias, aquellas que suceden entre prisas desbordadas las que le hacen confirmar que el tiempo sólo lleva una dirección.

Fabián Luque es un alma enganchada a lo natural, adicto a vuestras emociones y miradas, aquellas a las que querréis mudaros mil veces para volver a vivir el día de vuestra boda. Un trabajo íntimo y cargado de sensibilidad, un aire fresco y elegante que frente a vuestra historia saca su mejor versión. Un tipo sencillo, convencido de que somos caminos y él quiere cruzarse en el vuestro. En este mundo sobra gente rota, pero él tiene la suerte de poder ver y plasmar en fotografías, que hay formas de quererse que duran toda la vida.